¡ Que mi corazón te alabe !

¡Dios les bendiga Amadas! 

Alabar es dar gracias, elogio y alabanza. Es glorificar celebrar, cantar. La alabanza es "halal", que viene de la palabra "Aleluya". ¿Cuantas pueden decir Aleluya? Esta palabra "Aleluya" encierra la idea de dar gracias y honor a aquel que es digno y que merece la alabanza.

¿Cuantas de ustedes le cantan al Señor? Porque dentro de su significado, alabar es cantar, es darle gloria a nuestro Dios y decirle lo grande y maravilloso que es él, decirle a través del canto cuanto le amamos y cuan agradecida estamos de su entrega y sacrificio en la cruz por amor a mí.

No existe un lugar donde no le podemos alabar, ya que lo podemos hacer en todo lugar y sobre todo en toda circunstancia, ya que nuestra alabanza es para el Dios que no abandona a sus hijos, ni los deja desamparados.

Este verso nos lleva a no solo alabar a nuestro Dios con nuestros labios, sino que antes de salir de nuestra boca debe salir de nuestro corazón. Debe alabar a Dios ese corazón agradecido, ese corazón lleno de alegría y ese corazón que aún se encuentra quebrantado y afligido.

Es por eso que el deseo de Dios es que no solo salga de tus labios, sino que sea como dice su Palabra: "Con todo nuestro corazón". Que sea una alabanza que salga de lo profundo de nuestro corazón, de ese lugar donde se piensa, se medita y se reflexiona acerca de lo que es Dios para mi vida. 

Es cierto que las situaciones que atravesamos muchas veces quieren frenar nuestra alabanza, quieren apagar nuestra adoración a Dios, sin embargo aunque no se nos haga facíl es ahí en ese momento donde debemos sacar fuerzas de debilidad y hacer lo contrario que pueda dictar nuestra mente y comenzar a cantar, alzando nuestra voz y dandole gracias al Dios que rescato del hoyo nuestra vida y que puso tus pies sobre peña.

Que nuestro corazón este lleno de lo que a él le agrada, porque un corazón que a él le agrada es un corazón agradecido y lleno de su infinito amor. 

Su Palabra nos habla y nos exhorta a como debe presentarse nuestro corazón delante de él en el Salmos 24:3‭-‬4 dice: "¿Quién subirá al monte de Jehová? ¿Y quién estará en su lugar santo?  El limpio de manos y puro de corazón; El que no ha elevado su alma a cosas vanas, Ni jurado con engaño."

Así que mis amadas hermanas no permitas que las circunstancias frenen y detengan tu alabanza. Dice su Palabra en el Salmos 51:15, "Señor, abre mis labios, Y publicará mi boca tu alabanza."  

Porque cuando yo no puedo, él es el que me da las fuerzas aún para abrir mi boca y glorificar su nombre.

¿Estas lista para alzar tu voz y alabarle no importanndo tu situación? Sé que tu respuesta será un fuerte Amén.

Dios te bendiga!

Escrito ✍️ Por Vaneliz Vales para