El que te acecha te quiere destruir

Durante esta semana quisiera que reflexionemos acerca de aquel que trabaja para quitar, robar y destruir lo más que hemos atesorado.

Y comenzaremos reflexionando con la Palabra que se encuentra en:

Estamos viviendo en un tiempo, donde estamos recibiendo más fuerte que nunca, las opresiones y los ataques del enemigo. Ataques en contra de la familia, ataques contra la iglesia, contra los valores, ataques que han minado la mente del ser humano, donde la depresión, el suicidio, los asesinados son la orden del día. Estamos viviendo la realidad del tiempo donde la iglesia esta por ser arrebatada al cielo y por lo tanto usted y yo tenemos un enemigo que sabe que le queda poco tiempo. 

Estamos enfrentándonos a un momento crucial para la Iglesia. Y este momento crucial que estamos viviendo será el que determinara quienes están preparados para irse con Él.

Yo quisiera hablarles de ese personaje que nos acecha, un personaje que ni a ustedes ni a mi nos gusta hablar acerca de él. Pero el que no nos guste hablar de él no significa que no sea real. Es tan real que la Palabra lo pone en evidencia, porque lo compara como un león, 1 Pedro 5:8 "como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar." Y si anda y anda buscando es porque es real. También lo compara como un ladrón, como padre de mentira, porque su fuerte es mentir, es engañar. Es ese personaje que arrastra a esta humanidad hacia el pensamiento que No existe un Dios.

La Palabra nos lleva y nos aconseja que no le ignoremos, 2Cor. 2:11dice:"para que Satanás no gane ventaja alguna sobre nosotros; pues no ignoramos sus maquinaciones." El apóstol Pablo sabía que no se le podía dar ventaja al enemigo. Porque si ignoramos sus maquinaciones, estamos viviendo como si no existiera un enemigo, y es eso lo que él quiere, que ignoremos lo real que él es.

Nosotras somos la iglesia del Señor, y Satanas tiene dos trabajos, uno: Tratar de impedir que las vidas lleguen a los pies de Cristo y dos: Hacer que la iglesia pierda su propósito aquí en la tierra, que pierda su norte, que se desenfoque, que se acomode a este mundo e ignore que un día sonará la trompeta. 

Y la palabra acechar significa: observar, aguardar cautelosamente con algún propósito. Existe alguien que te observa y no es para cuidarte, hay alguien que espera cautelosamente con propósitos no buenos, para destruirte.

Es una realidad que las batallas que vamos a enfrentar en nuestra vida como creyentes serán muchas y que las tendremos hasta que Cristo venga a buscar a sus escogidos. Pero mientras estemos en esta tierra tenemos que procurar acercarnos a Dios cada día más. Ya que aquel que nos sostiene en medio a la prueba se llama Dios, Aquel que nos da las fuerzas en medio a la adversidad cuando no podemos, se llama Espíritu Santo de Dios, y si dejamos de llenarnos de él, y bajamos la guardia, seremos un blanco fácil para nuestro enemigo. Porque mientras estemos en esta tierra, como fieles, debemos tener bien claro que existe un enemigo que nos acecha y que su propósito es destruirnos.

¿Cual es la intención de Satanas? La intensión de Satanas es buscar la ocasión perfecta para echarte mano, para dominarte, para apartarte del proposito de Dios, así como intentaron hacerlo con Jesús.

Ellos solo buscaban una ocasión para matarle y Jesús aprovecho aquella ocasión para confrontarlos con la verdad. Y es eso precisamente lo que debemos hacer usted y yo cuando nos sintamos acechados, confrontar al enemigo con la verdad de la Palabra. 

No olvide amada hermana, que él no quiere ser descubierto, más si la Palabra de Dios esta en nuestro corazón tendremos las herramientas para desenmascararlo. 

Así que mis hermanas a llegado el momento para  demostrarle a Satanás y a sus demonios que no vamos a descuidar la guardia, vamos a demostrarle a nuestro enemigo que aunque sí viene disfrazado lo vamos a reconocer, no olvides que no habrá nada que te podrá hacer frente si contigo esta el Señor. Esto es lo grande de confiar y esperar en el Señor, que mientras usted y yo nos separamos para Dios, aunque si el enemigo se levanta, Dios se encargara de pelear tu batalla, que aunque si el enemigo trata de robarnos la fe, usted y yo confiamos que el Señor se encargara de allanar nuestro camino, que aunque Satanas lance sus dardos de desanimo, usted y yo esperamos que el  Señor se encargara de cumplir las promesas que nos dejo en su poderosa Palabra. 

Dios les bendiga!!

✍️ Escrito por Vaneliz Vales para