Fortalecidas en medio al campo de Batalla

¡Dios les bendiga Amadas!

Durante esta semana quisiera que reflexionemos acerca de lo necesario que es tomar nuevas fuerzas en el Señor en medio a las situaciones que se han levantado en estos ultimos tiempos, situaciones que se han convertido en nuestro campo de batalla.

Unas de las cosas que cada una de nosotras no deseamos experimentar  son esos momentos donde nos sentimos en medio a una batalla espiritual y más cuando en esa batalla nos sentimos sin fuerzas.

Sin embargo debemos recordar esa Palabra que se encuentra en el libro de Isaías 40:29 que nos dice: "él da esfuerzo al cansado y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas". Este verso de Isaías nos hace entender claramente que a nuestra vida llegarán momentos en los cuales nos vamos a quedar sin fuerzas para seguir luchando. Pero que a pesar de sentirnos cansadas, él nos dará el esfuerzo para seguir caminando. Y es una realidad que van a llegar situaciones que nos van a dejar casi en el suelo, pero si ponemos nuestra esperanza en él, él multiplicará nuestras fuerzas.

Su Palabra en el Salmo 121:2 nos alienta y nos dice de donde viene nuestro socorro y nuestra ayuda cuando nos sentimos desmayar en medio al campo de batalla. Podemos sentirnos derribadas, donde nuestras rodillas se debilitan, más no destruídas.

 No olvidemos que nuestro enemigo planea día a día como destruirte, sin embargo las promesas del Señor nos hacen más fuertes cada día, nos queda reclamarlas y confiar que es con su Poder.

Las situaciones que atravesamos en ciertos momentos no deben apagar nuestra fe y confianza en el Señor, ya que como nos dice 2 Corintios 4:17: "Porque esta leve tribulación momentánea, (lo que tu estas atravesando en estos momentos han de producir en tu vida) produce en nosotros, un cada vez más excelente y eterno peso de gloria."

¿Estamos solas en medio al campo de batalla? En ninguna manera, en el libro de Mateo 28:20, nos afirma que él estaría con nosotros todos los días hasta el fin del mundo.

 Todas sus promesas estan ahí, plasmadas en su Palabra y están ahí para alentarnos a no quedarnos en el suelo, a no seguir derribadas y para que recobremos nuevas fuerzas.

Es por eso que nuestra vida debe ser dirigida a través de su Palabra, que es la que nos enseña el camino por el cual debemos andar. Su Palabra nos proporciona luz cuando todo se ve obscuro, vida cuando hay muerte, alimento y agua cuando hay hambre y sed y nuevas fuerzas cuando nos sentimos desalentadas, débiles y a punto de desmayar. Es así como podremos recobrar esas fuerzas que han sido quitadas, esas fuerzas que han sido tocadas, a través de su Palabra y su Espíritu Santo.

Y es aquí donde ese verso de Zacarías me llevaba a meditar que si el Espíritu Santo está ahí, dentro de tí, guiandote, redargullendote, dirigiendote, tambien esta ahí para fortalecerte. Que no tenemos que recurrir a ningún lado a buscar tranquilidad, si el que esta dentro de tí te puede llenar de paz.

No tienes que calmar tu ansiedad distrayendo tu mente en otras cosas, si el Espíritu Santo esta ahí dentro de tí para calmar tu ansiedad através de su Palabra.

Porque no es con ejercito, no es buscando maneras externas para vencer la batalla que estas peleando, que vas a obtener victoria, o que vas a recibir las fuerzas que necesitas, es por medio de Su Espíritu  Santo. Ese mismo que te dice yo soy tu escudo, yo soy tu paz, yo soy el que te defiendo, yo soy el que te ayudo.

Ahora les pregunto, ¿Donde está el 

Espíritu Santo en tu vida? El Espíritu Santo está dentro de tí, por lo tanto no debemos buscarlo en las cosas que puedes ver o escuchar, buscalo ahí en lo profundo de tu ser. Búscalo ahí, en tu corazón, deja que te ministre, deja que te consuele, deja que sea él que te fortalezca. 

Y sigue diciendo el verso, "Ni con fuerza". ¿Cuantas veces has intentado con tus estrategias, ideas y fuerzas solucionar un problema? Dios te conoce, y él sabe hasta donde puedes llegar. Porque el campo de batalla es grande, es un lugar donde hay enfrentamientos de todo tipo, donde tu enemigo esta esperando ver como lo atacas, pero que tambien esta atento a las armas que estas utilizando contra él. Y no podemos olvidarnos que él vigila tu vida, y esta pendiente cuando dices que te sientes sin fuerzas para volver a contra atacar.

Pero lo que él no sabe es que de ahora en adelante, las cosas van a cambiar, porque el Espíritu Santo que está dentro de tí, te renueva de día en día, fortalece tus manos, así como se fortalecen las alas del aguila, y hace tus pies como de cierva y te hace andar en las alturas. 

Las fuerzas son sinónimo de que yo puedo hacerlo, de que soy capaz, de que no necesito ayuda. Estar sin Fuerzas nos lleva a la humillación, a entregarle todo y a depender de Dios.

Este mensaje a Zorobabel es una enseñanza donde podemos ser ministradas, ya que estas Palabras llevaron a que Zorobabel entendiera que no hacía falta que fuera poderoso, ni que necesitara un gran ejército; si no que lo único que necesitaba era su espíritu. Y así le dijo el Señor: Yo soy el Dios todopoderoso, y te aseguro que así es.

Así que mis hermanas esto no depende de nosotras, esto depende de Dios. Esto no depende de tus fuerzas humanas y capacidades, esto depende de las fuerzas que provienen de Él y de lo que Él ha puesto en tus manos. Dejemos que sea él el que dirija nuestras vidas y nos lleve a la victoria dirigidas y tomadas de sus poderosas manos.

Dios te Bendiga !!

Escrito ✍️ por Vaneliz Vales para

Mujeres a los pies de Jesús