El Gozo que permanece
¡Dios les bendiga Amadas!
Durante esta semana quisiera que reflexionemos acerca de ese gozo que perdura y que no cambia.
Y comenzaremos reflexionando con la Palabra que se encuentra en:
1Tesalonisense 5:16
“Estad siempre gozosos”
Meditemos en esto:
¿Que es lo que permanece?
Lo que permanece es aquello que se mantiene sin cambios, en un determinado estado, en una determinada condición y situación. Se mantiene, se queda ahÃ, no cambia. O sea que no importa lo que estés pasando o en la condición en la que te encuentres, no importa la situación difÃcil o complicada que estés atravesando, el gozo que el Señor a depositado en tu vida a través de su EspÃritu Santo debe mantenerse, debe quedarse, debe durar, debe perseverar y residir en tu vida y en la mÃa como desde el principio.
Y esto lo podemos ver en esta primera carta a los tesalonisenses, donde nos esta hablando un hombre llamado Pablo, un ser humano que al igual que usted y que yo, tuvo un dÃa un encuentro personal con Jesús, un encuentro que cambio su vida y que nos puede dar cátedra de lo que es el gozo que permanece, ese gozo que se mantiene en medio a las pruebas y a las tribulaciones.
Ese encuentro que tuvo Pablo con Jesús transformó el carácter de Pablo. Y desde ese momento Pablo ya no volverÃa a ser el mismo, ya Pablo no actuaba como an-
tes, Pablo ya no hablaba de la misma manera que lo hacÃa antes, ni tampoco sentÃa lo que sentÃa antes por
aquellos a los cuales él perseguÃa.
Porque para que el gozo brote de nuestro carácter es necesario dejar que su EspÃritu cambie nuestra forma de pensar y de ver las cosas y asà nuestro gozo no dependerá de lo que nos pueda pasar en nuestro diario vivir.
El corazón de Pablo cambió, porque Jesús lo lleno de su perfecto amor. El corazón de Pablo cambió y ya no existe el odio, sino más bien regocijo y alegrÃa.
Y esto lo podemos ver cuando Pablo se dirigió a los filipenses y les dijo en Filipenses 4:4, “Regocijaos en el
Señor siempre. Otra vez digo: ¡Regocijaos!
Pablo pudo sentir y experimentar el cambio, y se dio cuenta desde ese dÃa que ya no le interesaba más llamarse Saulo.
El ser humano siempre a tratado de alcanzar por sus propias fuerzas la felicidad. El hombre y la mujer desde
que comienzan a tener uso de razón, viven de placer en placer, de diversión en diversión, siempre intentando
apagar su sed de gozo, bebiendo en cisternas rotas que no pueden satisfacerla.
La palabra dice en Salmo 16:11, “En tu presencia hay plenitud de gozo”. Que hermoso es estar en su presencia, allà donde nada nos puede quitar ese gozo inefable.
¿DÃgame usted si no hay una gran diferencia entre lo que usted era y lo que usted es ahora en Cristo?
Porque recordar de donde te saco Dios y lo que hizo por tÃ, lo que trae al corazón es un continuo gozo, un continuo gozo que permanece.
Si vamos a la Palabra, Pablo sentÃa una preocupación por los tesalonisenses, èl los habÃa dejado allà y Pablo estaba gozoso de aquel grupo de creyentes, asà que les dio unas instrucciones prácticas para la vida diaria.
El gozo es una emoción intensa. Gozo, es lo que anhela el hombre, y lo que busca; y solo lo encuentra cuando encuentra a Dios. No se puede forzar a una persona a que demuestre gozo si no hay una relación gozosa con El Salvador, el autor del verdadero gozo.
Y en todas sus cartas podemos ver que Pablo tenÃa esa relación gozosa con su Salvador. Uno de los principales propósitos del EspÃritu Santo al entrar en la vida de un cristiano, es el de cambiar esa vida y hacernos más parecidos a Cristo.
Por eso no podemos concebir, cuando un cristiano que dice tener al EspÃritu Santo, ver como su comportamiento no va acorde con una vida en el EspÃritu, y siempre esta atribulado, triste, enojado y derrotado.
Asà que mis hermanas, no estorbemos la obra transformadora del EspÃritu Santo en nuestras vidas, ni olvidemos en quien está puesta nuestra esperanza.
Que el fruto del EspÃritu se haga real en su vida, para que asà los demás puedan también desear ser llenos de su EspÃritu. Asà el Gozo que permanece en su vida no podrá ser arrebatado tan fácilmente.
Y para terminar, Salmo 28:7: “Jehova es mi fortaleza y mi escudo; En el confÃo mi corazón, y fui ayudado, por lo que se gozo mi corazón, y con mi cántico le alabaré.
El gozo que permanece, se mantiene sin cambios no importando por la situación en la que estamos viviendo, ya que el EspÃritu Santo hace crecer en nosotros el fruto
de su EspÃritu y nos gozamos en él aún en medio a las adversidades.
Dios te Bendiga!!
Escrito ✍️ por Vaneliz Vales para
Mujeres a los pies de Jesús ©️
Dios me las bendiga hermosa reflexion
ResponderEliminarAmén por esa palabra para mi vida.
ResponderEliminarDios continúe usandoles en este ministetio
Gloria a Dios por esa palabra, ya que satanás y sus principados, potestades siempre quieren quitar el gozo de los escogidos de Dios.
ResponderEliminarAmén el señor te bendiga gracias por llenar el corazón con palabras tan hermosas muy bonita reflexión que nos impulsa a creer más y más en nuestro Dios
ResponderEliminarAmen
ResponderEliminarQue Dios la bendiga
Muchas gracias por esta hermosa refleccion, Jesucristo el Señor nos ayude a estar siempre gozosas, por sus promesas y a travez de su EspÃritu Santo
ResponderEliminarGracias por estos mensajes
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